El presidente de los obispos llama al diálogo interreligioso
El presidente de la Conferencia
Episcopal de Pakistán denuncia que el extremismo islámico ha aumentado
en los últimos años, cuando se cumple un año de la condena a muerte de
Asia Bibi, cristiana acusada de blafemia. El diario vaticano se hace eco
este martes de las conversiones forzadas de mujeres al islam,
denunciadas por una organización no gubernamental.
“Las minorías
religiosas en Pakistán son discriminadas en el silencio del gobierno y
las instituciones” y “el extremismo islámico ha crecido mucho en los
últimos años y afecta a la vida social y política del país”, dijo a la
agencia Fides monseñor Joseph Coutts, obispo de Faisalabad y presidente
de la Conferencia Episcopal de Pakistán, un año después de que Asia
Bibi, una madre cristiana fuera injustamente acusada de blasfemia, y
condenada por el tribunal de Sheikupura el 8 de noviembre de 2010.
“Un año después de aquel veredicto trágico --dijo el obispo Coutts--,
la situación de las minorías religiosas no ha cambiado para mejor y, de
hecho, el país está plagado de serios problemas políticos, económicos,
sociales, morales, religiosos, que se refleja en musulmanes y no
musulmanes. En un año, el país ha perdido a dos puntales que se oponían a
la ley sobre la blasfemia, Shabhaz Bhatti y Salman Taseer, mientras que
la ley injusta no se ha tocado ni objetado”.
“Mientras tanto –añade el obispo- el fenómeno del extremismo islámico
ha crecido, con grupos que quieren imponer abiertamente la ley islámica
y establecer una teocracia. Su trabajo no sólo afecta a las minorías
cristianas e hindúes, sino también a otras minorías como los ahmadíes y
los chiítas. Es un fenómeno complejo y preocupante, que afecta a la
estructura y el sistema de todo el país”.
Según el obispo, “estos grupos extremistas tienen una fuerte
influencia en los tribunales” con “una presión indirecta sobre los
jueces y testigos” que afecta a la aplicación de la ley.
“Como Iglesia católica y como comunidad cristiana, estamos trabajando
junto a la sociedad civil, para promover una nueva cultura de diálogo,
armonía social, fraternidad, comprensión mutua, con todas las personas
de buena voluntad, sin importar su fe”, concluye monseñor Coutts.
El diario vaticano L'Osservatore Romano se hace eco este
martes de la grave situación que viven los cristianos en el país y los
continuos episodios de persecución que relata la agencia Fides.
La persecución a un matrimonio cristiano denunciada por la ONG World Vision in Progress se produjo bajo la cobertura de influyentes políticos de la Pakistan Muslim League-N, partido con representación parlamentaria que gobierna la provincia del Punjab.
Los altavoces de la mezquita de Farooqabad anunciaron oficialmente
que el matrimonio “Shahzad Masih y Rukhsana Bibi se han convertido al
islam y abandonado la fe cristiana”.
Según la ONG, citada por el diario vaticano, en el Punjab se han
registrado, en los últimos tres meses, veinticuatro casos de conversión
forzada al islam de mujeres cristianas. El 96% de los casos de blasfemia
se da en la provincia del Punjab y, a menudo, los falsos acusadores
siguen impunes.
El arzobispo de Karachi Evarist Pinto también llamó a la
reconciliación, durante un encuentro de oración por la paz, organizado
en la capital del Sind. En el evento, promovido por la asociación de
periodistas Karachi Press Club, participaron cristianos, musulmanes e hindúes.
“No se puede dejar de reconocer que somos todos hermanos y hermanas
ante Dios”, dijo el obispo ante el auditorio interreligioso, pidiendo a
los fieles de todas las confesiones vivir juntos en paz. Es la primera
vez que el partido fundamentalista Jamiat-e-Islami participa en
una iniciativa de este tipo. En su intervención, monseñor Pinto expresó
su preocupación por el creciente número de recientes episodios de
violencia en Pakistán.
“Por ello los cristianos nos dirigimos a Jesús, convencidos de que
Cristo no sólo trae un mensaje de paz sino que Él mismo es la paz”,
concluyó el arzobispo.
zenit.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario