Benedicto
XVI se despidió esta tarde de Asís con la firme convicción de que “la
dimensión espiritual es un elemento clave en la construcción de la paz”,
como lo ha demostrado esta peregrinación en la que creyentes y no
creyentes han sido capaces de comprometerse en un diálogo fraterno. El
Papa dio de forma especial las gracias a los numerosos jóvenes que,
peregrinando a pie desde Santa María de los Ángeles, han testimoniado
“cómo, entre las nuevas generaciones, hay tantas personas comprometidas
para superar la violencia y las divisiones, y ser promotores de justicia
y paz”.
El Papa subraya también que tras haber renovado el compromiso por la paz “nos sentimos aún más profundamente implicados en el viaje común de la humanidad”. Porque como ha asegurado el Santo Padre “vamos a permanecer unidos, vamos a seguir encontrándonos, vamos a seguir juntos en este viaje, en el diálogo, en la construcción diaria de la paz y en nuestro compromiso con un mundo mejor, un mundo en el que cada hombre y cada mujer y cada persona pueda vivir de acuerdo con sus propias legítimas aspiraciones”.
CVV
DISCURSO COMPLETO
Ilustres huéspedes, queridos amigos:
Al término de esta intensa jornada deseo agradecer a todos vosotros. Viva gratitud va a quienes han hecho posible el encuentro de hoy. Un agradecimiento particular a quien, una vez más, nos ha hospedado: la ciudad de Asís, la comunidad de esta Diócesis con su Obispo, los hijos de San Francisco, que custodian la preciosa herencia espiritual del Pobrecillo de Asís. Un agradecimiento también a los numerosos jóvenes que han realizado la peregrinación a pie desde Santa María de los Ángeles para testimoniar que, entre las nuevas generaciones, son tantos los que se empeñan para superar violencias y divisiones, y para ser promotores de justicia y de paz.
El evento de hoy es una imagen de cómo la dimensión espiritual es un elemento clave en la construcción de la paz. A través de esta peregrinación única hemos tenido la capacidad de comprometernos en un diálogo fraterno, de profundizar en nuestra amistad y de encontrarnos juntos en el silencio y en la oración.
Después de haber renovado nuestro compromiso por la paz y de de habernos intercambiado recíprocamente un signo de paz, nos sentimos aún más profundamente implicados, junto con todos los hombres y mujeres de las comunidades que representamos, en nuestra común tarea humana.
No somos seres que existen separadamente; debemos seguir encontrándonos, seguir unidos en esta empresa y en diálogo en la cotidiana construcción e la paz y en nuestro compromiso por un mundo mejor, un mundo en el que cada hombre y cada mujer así como cada pueblo puedan vivir en armonía con sus legítimas aspiraciones.
Agradezco de corazón a todos los aquí presentes por haber aceptado mi invitación de venir a Asís como peregrinos de la verdad y de la paz y os deseo a cada uno con las palabras de san Francisco que el Señor te dé la paz.
El Papa subraya también que tras haber renovado el compromiso por la paz “nos sentimos aún más profundamente implicados en el viaje común de la humanidad”. Porque como ha asegurado el Santo Padre “vamos a permanecer unidos, vamos a seguir encontrándonos, vamos a seguir juntos en este viaje, en el diálogo, en la construcción diaria de la paz y en nuestro compromiso con un mundo mejor, un mundo en el que cada hombre y cada mujer y cada persona pueda vivir de acuerdo con sus propias legítimas aspiraciones”.
CVV
DISCURSO COMPLETO
Ilustres huéspedes, queridos amigos:
Al término de esta intensa jornada deseo agradecer a todos vosotros. Viva gratitud va a quienes han hecho posible el encuentro de hoy. Un agradecimiento particular a quien, una vez más, nos ha hospedado: la ciudad de Asís, la comunidad de esta Diócesis con su Obispo, los hijos de San Francisco, que custodian la preciosa herencia espiritual del Pobrecillo de Asís. Un agradecimiento también a los numerosos jóvenes que han realizado la peregrinación a pie desde Santa María de los Ángeles para testimoniar que, entre las nuevas generaciones, son tantos los que se empeñan para superar violencias y divisiones, y para ser promotores de justicia y de paz.
El evento de hoy es una imagen de cómo la dimensión espiritual es un elemento clave en la construcción de la paz. A través de esta peregrinación única hemos tenido la capacidad de comprometernos en un diálogo fraterno, de profundizar en nuestra amistad y de encontrarnos juntos en el silencio y en la oración.
Después de haber renovado nuestro compromiso por la paz y de de habernos intercambiado recíprocamente un signo de paz, nos sentimos aún más profundamente implicados, junto con todos los hombres y mujeres de las comunidades que representamos, en nuestra común tarea humana.
No somos seres que existen separadamente; debemos seguir encontrándonos, seguir unidos en esta empresa y en diálogo en la cotidiana construcción e la paz y en nuestro compromiso por un mundo mejor, un mundo en el que cada hombre y cada mujer así como cada pueblo puedan vivir en armonía con sus legítimas aspiraciones.
Agradezco de corazón a todos los aquí presentes por haber aceptado mi invitación de venir a Asís como peregrinos de la verdad y de la paz y os deseo a cada uno con las palabras de san Francisco que el Señor te dé la paz.
radiovaticana.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario